resulta que me estoy preparando para mi semestre en Holanda estudiando el segundo año de mi master sobre género -feminismos y afines- así que creí oportuno decidirme de una vez y mandarle a mi tutora el tema de mi futura tesis, antes de que se canse de mí y me pegue una académica patada en mi inquieto culo. por los viajes, lo de inquieto digo.
así que repasé las dos opciones que tengo:
1) representación de los espacios de mujeres en el cine hispanoamericano
2) mujeres en la blogosfera… o algo así
la opción 1 es la más fácil porque ya tengo medio escrita la tesis por mi independent study sobre el tema en California. pero la número 2 me llama más y si encontrara algo rápidamente que me hiciera feliz… pues sería mucho mejor.
así que me he puesto a repasar un poco las tendencias en el ciberfeminismo –ejemplo breve– y me he encontrado con el personaje histórico de Ada Lovenlace –antes Byron– que fue quien creó el primer lenguaje de programación… en el siglo xix!!!
[añadido posterior] esta es la razón or la que creo que es necesario estudiar la historia o la literatura o las ciencias o lo que sea… considerando el género como un factor. si te interesa la historia de la informática es posible que conozcas a Turing, a quien se considera el padre de la informática. quizá eres una de las no muchas personas que conocen el trabajo de Babbage, que diseñó pero nunca construyó la máquina analítica/diferencial -la primera máquina que potencialmente llevaba a cabo instrucciones/programas que le eran suministrados vía tarjetas perforadas-. pero poca gente sabe que fue Ada quien vio los diseños de Babbage y escribió los programas necesarios para que la máquina llevara a cabo complicadas operaciones matemáticas, los primeros programas como tales, con capacidad de repetirse y crear loops que incluían varias instrucciones. una pasada tratándose del 1850 o así.
pero no se oye hablar de ella. durante mucho tiempo se la tuvo por «transcriptora»de la obra de Babbage… hasta que se encontró su trabajo y alguna investigadora se tomó la molestia de entender esas siglas que aparecían bajo las instrucciones para la máquina analítica. y no sé por qué resulta extraño que fuera ella -matemática con formación universitaria- tuviera el conocimiento suficiente para desarrollar esos programas… bueno, claro, era mujer. y esa es la razón de siempre. por ese motivo nustro conocimiento está capado -válgase la paradógica metáfora-.
con los hombres eso no pasa… más bien al contrario. conocemos todo lo posible sobre hombres que se crée/quizá hicieron algo importante. y eso pasa en arte, en ciencia… en todo campo del conocimiento. por ejemplo, si pregunto quién fue el primer gran escritor de la historia del hombre, ¿quién viene a tu mente?
piensa antiguo
más que la biblia, por favor.
vale, eso es. La Ilíada, la Odisea. Homero, el gran bardo ciego. pero sabes que es un personaje casi de leyenda, ¿verdad?. sobre él todo son referencias cruzadas que aparecen siglos después de su supuesta vida. y está claro que las dos obras que principalmente se le atribuyen son en realidad creaciones diferentes en las que han participado varias manos. osea que el tio es un nombre dado a un fantasma literario. y está bien, parte de la leyenda, hay bustos suyos a disposición de quién los quiera comprar… y quedan muy bien sobre la mesa del despacho.
pero si intentas hacer eso con una mujer… bueno, entonces te ocupas de tonterías sin fundamento científico. sin rigor.
otro tema, para hablar durante horas, es el de las mujeres que quedan fuera de ciertas disciplinas por no encajar en lo que el pensamiento normativizador, hegemónico -para no decir «el patriarcado»- define como literatura, o como ciencia, o como filosofía -por meterme en un jardín no apto para mis botas de paseo-.
así que quiero reivindicar a Ada… y procastinar un poco en mi elección de tema para la tesis.